¿Qué hacemos los matemáticos?
Publicado: el 11 marzo, 2015 por AdminKonrad / Konrad Lorenz
Durante la segunda semana de marzo, las matemáticas se tomaron la Konrad Lorenz debido a que el sábado, [Mes (3) Día (14) Año (15)], es el Día Pi del Siglo. Una histórica coincidencia que se repetirá sólo hasta el año 2115.
Para dar inicio a esta semana de celebración matemática, durante la jornada de profundización de la Facultad de Matemáticas e Ingenierías, el día martes se realizó un panel con cinco matemáticos en diversos campos de esta ciencia, donde nos contaron a la comunidad Matemática Konradista por qué estudiaron matemáticas y cómo llegaron a sus respectivos campos.
El primero en compartir su experiencia fue Edgar Malagón, matemático en el área de las finanzas. Entre varias cosas, mencionó que por ejemplo un matemático en el área de las finanzas no permite que una persona se endeude más de lo que debe. También nos contó que supo por qué estudió matemáticas cuando descubrió que con los números que hacía en su oficina estaba teniendoun impacto en la vida de las personas en situaciones desfavorecidas, supo por qué estudió matemáticas cuando descubrió que a través de la matemática estaba siendo y haciendo país.
En medio de risas del auditorio y mencionando jocosamente que el terremoto que ocurrió en la tarde no la había dejado acabar de escribir su discurso, la segunda en compartir sus experiencias fue Olga Lucía León, matemática en el área de la educación. Ella mencionó que estudiar matemáticas es un reto que pocos comienzan y más pocos aun terminan, por eso quiso rendir un homenaje a todos aquellos que apoyan y hacen posible que se estudie matemáticas. También resaltó la estrecha relación que existe entre la matemática y la realidad/la comunidad. Con el cambio de siglo y la época de paz que se aproxima, la educación está de moda y la matemática tiene que ver con todos. Ahora más que nunca, las matemáticas están interconectadas con las otras áreas del saber.
El tercero en compartir sus experiencias fue Arturo Sanjuán, investigador en matemática aplicada. Nos contó que a los cinco años tuvo su primer encuentro con la matemática, cuando empezó a rayar las paredes de su casa con un compás que se encontró. Su mamá, entonces, le enseñó uno de los axiomas de la geometría de Euclides para que dejara de rayar las paredes. Sin embargo, durante su época de colegio, fue casi expulsado debido a que le iba muy mal en matemáticas. A él le enseñaron las tablas de multiplicación con regla, y nos confesó jocosamente, que aún no se las sabe. Pero gracias a unos libros que un tío trajo de Rusia, descubrió que las matemáticas no eran realmente todas esas tonterías que le estaban enseñando en el colegio. Cuando iba entrar a estudiar a la universidad, quería estudiar teatro o astronomía. Sus papás le dijeron que no a la primera opción y ya que en su época no existía un pregrado de astronomía en el país, su lógica fue la siguiente: “como la astronomía se basa en la física y la física se basa en la matemática, voy a estudiar matemáticas”. De manera graciosa, dice que seguramente en ese momento pensaba estudiar matemáticas, luego física, luego astronomía y después quizás cogería un cohete para ser un astronauta. Empezó a estudiar matemáticas sin saber bien que eran, sin siquiera saber cómo factorizar, sin embargo como las matemáticas de cierta manera son un lenguaje, empezó a leer, a entender y a conectarse con las matemáticas. Durante su doctorado, decidió resolver algún problema que aún no tuviera solución, su idea no era saber más matemáticas, sino ir aprendiendo en el camino lo que necesitara para resolver este problema. Resaltó que las matemáticas se aprenden discutiendo con personas que sepan, asistiendo a congresos y a foros, que las matemáticas son una disciplina y por eso se necesita de disciplina para lograr convertirse en un matemático.
La siguiente en compartir sus experiencias fue Daniela Carrillo, matemática en el área industrial. Ella resaltó que la labor de un matemático es pensar el cómo y el por qué. Un matemático se hace preguntas. Un matemático tiene un proceso de pensamiento diferente al de las personas de otras áreas, ya que se requiere pensar rigurosamente.
El último en compartir sus experiencias fue Jeisson Bohorquez, matemático en el área de la actuaría y egresado Konradista. Él dice que admira a los docentes y que no tiene esa vocación, por eso buscó otro campo de la matemática y este fue la actuaría. La típica pregunta que le hacen a un actuario es: “¿dónde actúa?”, ya que la mayoría de personas no saben qué es un actuario y piensan que tiene algo que ver con la actuación. Pero realmente un actuario se desempeña en seguridad social, seguros o finanzas. Su deber es cuantificar el riesgo aplicando modelos matemáticos y estadísticos.
Resumiendo el panel, los principales puntos que se tocaron fueron los siguientes:
• Muchos pensarían que la matemática es abstracta, pero realmente siempre está la pregunta ¿y qué se puede hacer con las matemáticas en la vida concreta?
• El deseo de impactar positivamente a través de las matemáticas ha movido a los matemáticos en el tiempo.
• Las circunstancias fueron llevando a los matemáticos del panel hasta sus respectivos campos. Por eso hay que estar pendientes, conversar y buscar mentores.
• Para estudiar matemáticas, hay que tener un interés personal fuerte. Para mantenerse, hay que tener disciplina.
• Las matemáticas son una ciencia interdisciplinar, no está aislada. Hay que pensar con otros, y hacer aportes usando nuestra forma diferente y rigurosa de pensar.
Después de la presentación se abrió un espacio para que los estudiantes hicieran preguntas a los panelistas. Se resaltó la importancia de que, como ser humano, uno se puede equivocar, pero que también, como ser humano, uno puede ser lo que quiere. Hay que hacerse preguntas, pero tampoco atormentarse por lo que viene. Que los matemáticos estamos como en una jungla con un machete abriendo campo; el mundo globalizado de hoy en día necesita más mentes matemáticas. Los matemáticos tienen la capacidad de reestructurar y resolver problemas.
Como toda buena actividad, quedaron muchas preguntas sin resolver y sed por saber más. La jornada estuvo llena de risas y sentimiento de identificación. Un panel que marcó hito en la historia de la universidad, dando un gran inicio a la semana matemática en la Konrad Lorenz y siendo un abre bocas para el día Pi del siglo.